descripción

Un edificio histórico único en su tipo que solía ser un restaurante junto a la carretera hace casi cien años. La propiedad mantiene el encanto rústico y auténtico andaluz que es difícil de encontrar más. La parte principal de la propiedad que es habitable y en funcionamiento fue reformada en los últimos 20 años. La otra mitad de este edificio principal es estructuralmente sólida y necesita organización interior, pero también hay numerosas dependencias que envuelven el patio que está deteriorado. Esta hermosa Finca se asienta sobre una parcela de 20 hectáreas de terreno, la mayor parte es almendros de secano y montaña. Saliendo de la carretera a tan solo 30 km del aeropuerto de Málaga y de la costa, accedemos primero a un patio cuadrado. La casa principal está a la izquierda y entrando en ella tenemos un gran recibidor rústico de techos altos. A la izquierda hay un comedor y al lado una gran cocina rústica andaluza. A la derecha hay un dormitorio doble en la planta baja. Hay una puerta que conduce a la antigua despensa negra de la cocina, un lugar donde hay un tanque de almacenamiento de aceite aún enterrado en el suelo y esta parte se conecta a la salida trasera y también a la parte no desarrollada del edificio. Subiendo las escaleras, hay un gran dormitorio a la izquierda con baño en suite. Esta parte tiene techo inclinado con vigas. A la izquierda de las escaleras accedemos a un salón con balcón. Este distribuye el acceso a tres dormitorios y un baño. Hay otra ala del piso de arriba que es tosca y se convertiría en otro apartamento tipo suite o en algunos dormitorios más. Por el momento, tenemos 5 dormitorios y dos baños, hay espacio para mucho más. Hay un garaje a la izquierda del patio y un anexo independiente a la derecha de la casa y la parte trasera derecha de la casa también necesita ser desarrollada. Esta es una propiedad perfecta para una residencia espaciosa, un hotel boutique o tal vez incluso un restaurante. El terreno se inclina sobre la ladera hacia el este y el oeste de la propiedad y ofrece las vistas más impresionantes que pueda imaginar. Aparte de una pequeña parcela de olivos, la mayor parte de la tierra, casi la mitad, es cultivo de almendros. El resto son prados y robles. El acceso es bueno, tenemos agua corriente y electricidad. Las vistas son espectaculares. Si está buscando características auténticas, no se lo pierda.