descripción

Esta finca de caza única en venta en Girona está situada en la comarca del Alt Empordà, en Cataluña, al noreste de España, entre las faldas de los Pirineos y la costa Mediterránea. Goza de excepcionales vistas lejanas de la Costa Brava, al parque natural del Cap de Creus y a la bahía de Roses. La finca tiene una superficie total de 178,15 hectáreas (1.781.500 m²), formada por extensiones de pinares, encinares y zonas de masa mixta de pino y encina. Dentro de la finca, además, se encuentran una serie de campos de cultivo que abarcan unas 14 hectáreas (140.000 m²). La finca está completamente vallada, con más de 8 kilómetros de cercas de alambre y más de 30 kilómetros de caminos de tierra en buen estado. Asimismo, la finca dispone de un Plan técnico de gestión y mejora forestal, aprobado por la administración y revisado recientemente donde se planifican las mejoras y aprovechamientos de la finca para los próximos 10 años. La finca forma parte de un coto de caza y dispone de una red de más de 30 kilómetros de caminos principales, secundarios y de desembosque que conectan perfectamente todo el conjunto. La superficie construida se agrega en un núcleo central con una casa principal, una casa de invitados, una cocina-comedor exterior cubierta cerca de la piscina y de una cocina de tipo industrial totalmente equipada que permite la elaboración de carnes y embutidos. También dispone de una gran nave que sirve de almacén, un depósito de combustible, un espacio para guardar animales de dimensiones grandes, varios invernaderos con sistema de riego y otras instalaciones. Además, alberga un total de siete antiguas masías catalogadas que conservan su estructura a las que se tiene un acceso funcional mediante los caminos de que dispone la finca. Hay más de 500 animales en la finca cuyas principales especies son el jabalí y el gamo. La vegetación es típicamente mediterránea, con robles y pinos, romero, lavanda, brezo, espárrago, madreselva, espino cerval y arbustos. También encontramos diferentes huertos de árboles frutales como manzanos, perales, olivos, higueras, naranjos y mandarinos, y un extenso cultivo de hortalizas. La finca forma parte de un gran coto de caza y se vende con todas las licencias necesarias.