descripción

Esta casa rural de arquitectura tradicional canaria, situada en un entorno natural y rural privilegiado, ofrece un potencial único para aquellos que busquen vivir o invertir en un lugar con historia, tranquilidad y unas vistas excepcionales. La vivienda, que se distribuye en dos plantas, conserva la esencia de la arquitectura típica de la isla. En la planta baja, se encuentran los cuartos de apero, ideales para almacén o almacenamiento de herramientas, con un gran valor etnográfico. En la planta alta, se encuentran dos dormitorios, un baño y una cocina, con espacios que mantienen la calidez y el carácter original de la construcción. El interior de la casa destaca por su carpintería original de madera de tea, un material autóctono que aporta una estética única y una gran resistencia. A pesar de necesitar reforma, la propiedad conserva intacta su esencia y valor arquitectónico, lo que la convierte en una joya de la tradición canaria. La casa está emplazada en una antigua finca familiar, lo que le otorga un fuerte valor histórico y etnográfico. Desde su patio y huerta, podrá disfrutar de unas vistas espectaculares al paisaje rural, enmarcado por la belleza natural que rodea la propiedad. La parcela ofrece amplias posibilidades para desarrollar proyectos agrícolas o simplemente disfrutar de la paz y quietud que solo un entorno como este puede ofrecer. Una excelente oportunidad para quienes buscan rehabilitar una propiedad con gran potencial y personalidad, en un entorno rural que invita a la desconexión y la paz.